Anulada la propuesta del PP de cargar las primas a las renovables a los Presupuestos
La Comisión de Industria, Energía y Turismo del Congreso de los Diputados aprobó el jueves el proyecto de ley de medidas fiscales para la sostenibilidad energética con el propósito de aprobarlo con competencia legislativa plena. Esta norma, cuyo anteproyecto aprobó el Gobierno a mediados de septiembre, tiene como objetivo acabar con el déficit de tarifa en 2013 e incluye varios impuestos nuevos con el objetivo de elevar en 2.734 millones los ingresos del sistema eléctrico. El Partido Popular retiró su propuesta de que las primas a las energías renovables se carguen a los Presupuestos Generales del Estado.
El texto acordado establece que los Presupuestos Generales del Estado "destinarán cada año un importe equivalente a la estimación de la recaudación anual del Estado derivada de los tributos y cánones incluidos" en la ley de Medidas Fiscales para la Sostenibilidad Energética con el objetivo de financiar los costes del sistema eléctrico.
El Grupo Popular retiró la enmienda por la que proponía que el 38,3% de las primas al régimen especial (renovables y cogeneración) corrieran a cargo de los Presupuestos Generales del Estado, algo que, según algunos grupos y el propio sector, politizaba y restaba visibilidad a la cuantía de las ayudas.
El PP aceptó una enmienda del PNV de carácter técnico, pero no recogió ninguna otra propuesta de las más de 130 de la oposición, que ahora deberá llevar sus iniciativas al Senado, donde los el grupo popular insiste que está abierto a negociar.
José Segura, del PSOE, consideró que la ley tiene un carácter "disparatado y exclusivamente recaudatorio" para combatir el déficit, que a su juicio se debe atajar modificando la Ley del Sector Eléctrico para crear un nuevo "marco normativo" de futuro. Tras rechazar que se cree un impuesto "que ya todos estamos pagando" y que "podría ser inconstitucional", el diputado alertó de que las medidas del proyecto repercutirán en los consumidores y en la competitividad de las zonas industriales. Rechazó que el reparto de la carga tributaria no sea "equitativa", por lo que propuso una nueva escala de gravámenes, y que se retiren todos los apoyos a las energías renovables, "que han generado actividad económica, empleo y una energía exportable" además de que reducen la dependencia energética y ayudan a combatir la contaminación.
El portavoz del Partido Popular de Industria, Antonio Erías, defendió que este proyecto intenta resolver una dificultad obvia de la economía española y del sector eléctrico "heredado" del Gobierno anterior: el déficit tarifario, que con el tiempo podría convertirse en déficit público. "La economía y los sectores productivos reclaman una mejora de la competitividad", dijo.
El proyecto de ley prevé la creación de un impuesto genérico del 6% para la producción eléctrica y de "céntimos verdes" para la generación con gas natural, carbón, fuel oil y gasóleo. También recoge nuevos gravámenes para la generación y almacenamiento de residuos nucleares, así como para la utilización de aguas continentales para generar electricidad, entre otras medidas.
Medidas adoptadas
El Gobierno ya ha adoptado medidas para lograr que en 2012 el déficit de tarifa no supere el tope legal de 1.500 millones de euros y ahora, con la nueva norma, aspira a que el sistema eléctrico deje de ser deficitario en 2013.
De las medidas contempladas, las nuevas imposiciones para nuclear e hidráulica elevarán en 574 millones los ingresos del sistema, mientras que el céntimo verde del gas tendrá una incidencia del 804 millones, frente a los 571 millones del nuevo impuesto a la producción.
Como parte del proceso de enmiendas en el Congreso, el PP propuso un traspaso de la financiación de las primas a las renovables desde la tarifa eléctrica hasta los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
En concreto, la propuesta del PP, que fue retirada, establecía que las cuentas públicas asuman durante 2012 y en los ejercicios posteriores un 38,3% de las primas a las energías renovables. El objetivo de esta medida, a la que se denomina coloquialmente "enmienda tubo", era garantizar que la recaudación que logre el Ministerio de Hacienda gracias a los nuevos impuestos pueda servir para aliviar los costes de la tarifa eléctrica.
Fuente: capitalmadrid.com
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