El presidente de la patronal asturiana (FADE), Severino García Vigón, señaló a preguntas de este periódico: «Con los avances en la seguridad de las centrales y la gestión de los residuos, y considerando la importante contribución de esta energía a la contención de las emisiones de gases de efecto invernadero, la energía nuclear debe ser una opción con la que hay que contar. Así lo entienden Francia y el Reino Unido, al igual que están haciendo los países escandinavos. A ellos se acaba de sumar Italia. ¿Por qué España debe ser una excepción? El Gobierno español debería tomar decisiones con rapidez (construir una central lleva 10 años), sin olvidar la renovación de las existentes».
Fuente: Lne.es
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