La tarifa de último recurso será una "lápida" para las cooperativas eléctricas, según Enercoop

El Real Decreto que regulará la puesta en marcha de la nueva Tarifa de Último Recurso (TUR) de energía a partir del segundo semestre del año supondrá en sus términos actuales una "lápida" para los pequeños suministradores y, en concreto, para las cooperativas eléctricas, advierte en un comunicado Enercoop, perteneciente a la Cooperativa Eléctrica San Francisco de Asís.

Para esta cooperativa valenciana de Crevillent, fundada en 1925, la norma impulsada por el Ministerio de Industria "coarta y limita seriamente la libertad en la actividad empresarial de las pequeñas compañías eléctricas", ya que supondrá "un perjuicio claro" este tipo de sociedades.

En concreto, Enercoop arremete contra la parte del decreto que reserva la comercialización de la nueva TUR a sólo cinco comercializadoras de último recurso, que serán sociedades dependientes de las grandes compañías eléctricas. El resto del suministro dejará de estar regulado por tarifas y pasará al mercado libre.

De esta forma, el consumidor que quiera conservar la tarifa regulada sólo podrá hacerlo siendo cliente de alguna de las cinco grandes eléctricas, y no de las múltiples pequeñas cooperativas del país.

Al tiempo que la libertad del consumidor queda restringida a un pequeño listado, las cooperativas eléctricas deberán asumir un precio por la energía superior y, además, transferir antes del 1 de junio sus clientes a una de las comercializadoras propuestas.

Al no poder facturar la cooperativa, sus socios dejarán de poder disfrutar del llamado 'ahorro cooperativo', una fórmula que es el resultado de comparar la diferencia entre los precios de la electricidad que suministra la cooperativa eléctrica con el resto de empresas de la competencia.

Los cooperativistas de San Francisco de Asís calculan que esta fórmula permite en su localidad ahorrar cerca del 15% de la factura de la luz.

"No entendemos cómo se puede favorecer a determinadas compañías eléctricas escudándose en que el resto de sociedades mercantiles, y en especial las cooperativas eléctricas, no son eficientes", lamentó el director general de Enercoop, Ildefonso Serrano.

"Ser eficientes implica poseer un óptimo servicio de atención al cliente, con oficinas y empleados que atiendan sus solicitudes; tener una adecuada red de suministro y distribución eléctrica; preservar los intereses económicos de los consumidores y velar para que las tarifas de la luz sean lo más reducidas posibles, y la cooperativa eléctrica cumple todos estos requisitos con creces", añadió.

Fuente: Europa Press